Una actividad didáctica organizada por la Delegación de Medio Ambiente que se suma a la programación que se ha llevado a cabo en el mes de marzo para fomentar el respeto al planeta

Una actividad didáctica organizada por la Delegación de Medio Ambiente que se suma a la programación que se ha llevado a cabo en el mes de marzo para fomentar el respeto al planeta

La Delegación de Medio Ambiente ha configurado un programa de actividades lúdicas durante el mes de marzo que coincide con varias efemérides que tratan de poner en relieve el estado del planeta. Un calendario que ha finalizado esta mañana con la celebración del taller ‘Ruido y Ciudad’ destinado a alumnos y alumnas de primaria de los colegios San José de Calasanz y Al Yussana con motivo del Día Internacional de la Concienciación del Ruido.

¿Puede ser divertido el silencio? Es el título de este taller escolar, de una sesión, que explora de la mano de Nilo Gallego y Magda Labarga, la posibilidad de la escucha, el ritmo y el ruido así como sus conexiones con la vida urbana y la ciudad. Este taller consta de distintas etapa, donde se requiere la participación del público, como un salón de escucha donde todo se amplifica o un mirador sonoro a través del cual los alumnos se asoman a la ciudad.

Una actividad dirigida a escolares de primaria y a sus profesores quienes tendrán la oportunidad de participar de una acción donde la comunicación existe, pero de otra manera, y la atención parte de otras lógicas diferentes a las habituales.