Ayuntamiento y Policía establecieron un plan de emergencia con el que movilizaron alrededor de sesenta efectivos para combatir las incidencias de la tromba de agua
Ayuntamiento y Policía establecieron un plan de emergencia con el que movilizaron alrededor de sesenta efectivos para combatir las incidencias de la tromba de agua
El alcalde de Lucena, Juan Pérez, ha presentado esta mañana junto con el concejal de Urbanismo, José Cantizani; el concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Adame; y el inspector jefe de la Policía Local, Rafael Blancar, la valoración de los daños ocasionados por la tormenta eléctrica que tuvo lugar ayer tarde en el municipio.
Se produjeron alrededor de una decena de incidencias, aunque la mayoría de ellas fueron subsanadas unas horas más tarde. La acumulación de agua ocasionó el levantamiento del asfalto en la avenida de la Guardia Civil y la calle Azalea, así como el hundimiento del acerado en la calle Martín Hurtado y La Calzada. En este sentido, también se produjo la inundación del puente de Córdoba quedando un vehículo atrapado en la balsa de agua y la rotura de la valla perimetral del parque canino.
En cuanto a los caminos municipales, el más afectado ha sido el tramo desde las Peñuelas hasta el Punto Limpio, de manera que solamente se puede acceder a través del Boulevard Los Santos, donde ya se han limpiado las zonas afectadas por la tromba. Del mismo modo, también fue necesario desalojar a los residentes de El Sauce, que fueron trasladados al hostal Mariceli, y de varios invitados de una comunión en la calle Los Claveles. Por su parte, varios sótanos quedaron anegados por la zona de Quiebracarretas, al igual que el patio de la Jefatura de la Policía Local. Otra de las consecuencias de la tormenta fue el desplazamiento de cornisas en la calle Jaime y la calle El Álamo y la caída de árboles en el Recinto ferial.
Hubo dos puntos más difíciles en lo que respecta al tráfico, ya que el Arroyo el Horcajo se desbordó y provocó el corte de la carretera A-3132 hacia las Navas del Selpillar. Igualmente, se cerró el acceso por la carretera de Puente Genil (CO-763), aunque a partir de las 22.00 horas ya estaba abierta de nuevo para la circulación de vehículos. La carretera del Calvario también resultó afectada por la tormenta con acumulación de agua y de barro. Asimismo, se inundaron el puente de Cabra y el camino de Torremolinos, donde se produjo el desplazamiento del muro de una empresa de albarizas.
Ante los medios de comunicación, el alcalde ha destacado que “no se han producido daños personales y los materiales no han sido cuantiosos”. Así, los servicios operativos, en colaboración con agentes de la Policía Local y bomberos de Lucena y de municipios vecinos (Priego de Córdoba, Puente Genil y Montilla), combatieron los daños ocasionados desde el primer momento y gracias a su actuación la mayor parte de las incidencias estaban solucionadas horas después de la tromba de agua. Alrededor de 21 agentes, 18 bomberos y unos 20 servicios operativos trabajaron encarecidamente para solucionar los problemas ocasionados por la tormenta eléctrica con la mayor brevedad posible.