Desde que en 1969 se produjeran los disturbios de Stonewall en Nueva York-Estados Unidos-, la comunidad mundial celebra, cada 28 de junio, una jornada dereflexión con el objetivo de visibilizar valores universales tales como la igualdad, elrespeto, la diversidad, la libertad y la no discriminación.

A pesar del progresivo reconocimiento de los derechos de las personas LGTBI en el sistema de protección de derechos de las Naciones Unidas en los últimos treinta años y particularmente, en Europa, no es menos cierto que, hoy en día, la diversidad sexual sigue siendo víctima de una brutal intolerancia y discriminación sufrida, en diferentes formas y manifestaciones, por lesbianas, gais, bisexuales, transexuales e intersexuales.

Según informes de Amnistía Internacional, sus derechos son pisoteados de forma permanente en muchos lugares del mundo. Son muchos los estados que con su propia legislación los vulneran y limitan, como el derecho de manifestación y reunión o la libertad de expresión.

El informe del año 2015, emitido por el Ministerio del Interior sobre Delitos deOdio, da un clara radiografía del problema que supone para la sociedad española la discriminación que sufre no sólo el colectivo LGTBI sino otros muchos por razones ideológicas, de género, racismo o xenofobia, entre otros.

Este año se celebra en España el DUODÉCIMO aniversario de la aprobación del matrimonio igualitario, siendo 23 los países que incluimos en igualdad ante la ley el matrimonio entre personas del mismo sexo.

A día de hoy, los Gobiernos locales españoles estamos a la vanguardia en el reconocimiento legal de los derechos del colectivo LGTBI pero lamentamos que su reconocimiento no se haya producido a nivel universal, ni de manera plena.

Por lo que es necesario avanzar hacia el reconocimiento y protección universal de la diversidad, desarrollando políticas públicas e implementando servicios que aseguren la igualdad efectiva de todas las personas, como elemento esencial para la convivencia, el progreso y el desarrollo social y económicosostenible.

Y, precisamente, es en ese contexto de igualdad efectiva donde los Gobiernos locales, puerta de entrada directa y real del sentir de la ciudadanía, estamos llamados a jugar un papel clave para garantizar la convivencia ciudadana y la no discriminación de la población. Los entes locales debemos reclamar nuestro papel como agentes esenciales en el desarrollo de políticas transversales y estratégicas que garanticen la igualdad, invirtiendo en programas en favor de la diversidad y la no discriminación de las personas, garantizando los derechos humanos y, en consecuencia, el principio de igualdad efectiva entre todos/as.

Los actuales tiempos en los que los radicalismos ofrecen su cara más cruel, es necesario que se haga un ejercicio profundo de vigilancia desde las instituciones públicas para erradicar y no permitir el menor atisbo de intento de actuación discriminatoria. La responsabilidad es de todos y cada uno, y exige un compromiso que no puede cejar en su empeño de promover los valores más nobles de nuestra sociedad.

Está claro que nuestra labor como garantes de los derechos de las personas es esencial, ya que no son posibles las políticas de igualdad sin los Ayuntamientos.

Por ese motivo, reivindicamos la necesidad de dotar a las Entidades Locales de las competencias en esta materia así como de suficientes medios y recursos para asegurar la implementación adecuada de todas las políticas e iniciativas necesarias para garantizar la igualdad efectiva de las personas. Por todo ello, nos sumamos a las voces que claman por un futuro en igualdad.

Asimismo, en lo que respecta al colectivo LGTBI, cuyo día internacional conmemoramos a través de la presente declaración, este Ayuntamiento condena el incremento del número de agresiones hacia personas LGTBI en nuestro país y se compromete a impulsar la puesta en marcha en los próximos meses de acciones a través de las diferentes áreas de gobierno, instituciones educativas y demás colectivos ciudadanos, a fin de conseguir una sociedad más cohesionada y respetuosa con la diversidad afectiva, sentimental, sexual y de género. Cabe reseñar, a modo orientativo, las siguientes:

1. Promover la creación de puntos de información en colaboración con los intervinientes municipales en las materias, en los que se prestará apoyo y asesoramiento a colectivos susceptibles de discriminación, entre los que se incluye a la población LGBTI.

2. Impulsar la elaboración y realización de programas, actuaciones, planes, actividades, eventos, jornadas, certámenes, propuestas formativas, … sobre la igualdad, la no discriminación de las personas y la diversidad familiar, en particular, organizadas por el Ayuntamiento y otras instituciones educativas y culturales, en barrios, colegios o escuelas de verano y cooperar, asimismo, en la difusión de exposiciones y campañas informativas por la diversidad, la no discriminación, el respeto, la inclusión y convivencia social, la tolerancia plena y la identidad de género.

3. Organizar y colaborar en actividades en torno al 17 de mayo (día contra la homofobia, la bifobia y la transfobia) y el 28 de junio (día por los derechos humanos de LGBTI), así como fomentar propuestas que refuercen la implicación y apoyo municipal en la defensa de la igualdad y la diversidad, garantizando los derechos individuales y colectivos en las distintas acciones que se desarrollen.

4. Apoyar proyectos de cooperación por el respeto a los derechos humanos de las personas LGBTI en países donde la homosexualidad aún es ilegal o socialmente perseguida, o existe cualquier tipo de injusticia social por razones ideológicas, de género, racismo o xenofobia, entre otras.